Cuando nacemos, la frecuencia de nuestra respiración debe estar ubicada en 30 y 60 respiraciones en el lapso de un minuto, cuando cumplimos 6 meses de edad, nuestra frecuencia deberá disminuir y ubicarse entre las 24 y 30 respiraciones cada 60 segundos. A partir del Primer año de edad y hasta los 5 años, lo regular de la frecuencia será entre 20 y 30 respiraciones por minuto.
Al superar los 6 años de edad y hasta los 12 años variará entre 12 y 20 respiraciones por minuto, a partir de esa edad y durante toda la vida adulta la frecuencia normal estará situada entre 14 y 18 respiraciones por minuto. Es necesario considerar que cualquier variación que supere los estándares planteados puede significar taquipnea transitoria
Términos para Comprender la Polipnea
La evaluación de nuestra respiración desde que nacemos, realizada por un especialista, es sumamente relevante para predecir diagnósticos respiratorios a una edad temprana y así disminuir riesgos durante el crecimiento y desenlaces fatales al hacernos mayores. Esto permitirá que enfoquemos nuestra dieta, rutina de ejercicios, o cuidados médicos en base a prolongar la vida.
Para comprender la polipnea debemos definir rápidamente dos términos similares. Taquipnea, se trata de la respiración acelerada y suele confundirse con taquicardia. La Batipnea, es una forma de respiración que se caracteriza por una gran profundidad y puede confundirse con la ausencia de aliento o ahogo.
La Polipnea se trata del incremento en la frecuencia y aumento exclusivo de la profundidad respiratoria, los médicos mencionan que es la mezcla de taquipnea y batipnea. Un ejemplo sencillo sería respirar mientras de levanta peso, mientras que en la taquipnea sería jadear como un perro.
Recomendaciones Para Mejorar Nuestra Respiración
Para cualquier padecimiento en el sistema respiratorio se recomiendan ejercicios, pero debemos tener la asesoría de los especialistas, no queremos empeorar nuestra condición ni sufrir algún accidente en medio de una rutina de ejercicios y terminar en la sala de emergencias de una hospital o dentro de una ambulancia por no tener las mejores recomendaciones.
Durante 10 minutos en cualquier lugar podrás hacer este ejercicio, debes estar sentado, de la forma correcta recomendada, colocarás las palmas de tus manos sobre tu estómago, cierra bien tu boca y toma todo el aire que puedas por tu nariz, luego coloca tu boca en forma de “u” y deja salir el aire muy lentamente.
En resumen, podemos agregar que este tipo de ejercicios no solo ayudarán a mejorar tu capacidad pulmonar, a sanar las dificultades respiratorias y mejorar tu estrés sino que traerán a tu vida, más rendimiento en las actividades físicas regulares, como caminar, subir escaleras o hacer el amor, cuidemos nuestra respiración y nuestra vida.