-Protege nuestro sistema digestivo:
La espinaca, entre otros vegetales, ayuda a proteger la membrana que recubre el interior del estómago; reduciendo la probabilidad de sufrir úlceras.
-Beneficia a nuestro cerebro:
La espinaca contiene diversos elementos, como folato, potasio y antioxidantes que ayudan a nuestro sistema nervioso y, en especial, al cerebro. Por ejemplo, el folato que contiene ayuda a prevenir la aparición de Alzheimer. También contiene potasio, que es un mineral necesario para el correcto funcionamiento de nuestro cerebro y para prevenir el deterioro de nuestras capacidades cognitivas.
-Reduce la probabilidad de padecer enfermedades oculares:
La espinaca contiene altas cantidades de xanteno, luteína y betacaroteno, así como vitamina A, elementos que cuidan y benefician nuestra visión. También cuenta con propiedades antiinflamatorias que ayudan a reducir la hinchazón y el cansancio en los ojos.
-Mantiene en niveles sanos la presión arterial:
Como mencionamos anteriormente, la espinaca contiene altas cantidades de potasio; pero también contiene muy bajas cantidades de sodio (sal). ¿Por qué mantiene en niveles sanos la presión arterial? Porque mientras que el potasio reduce la presión, el sodio tiende a aumentarla. Así mismo, la espinaca contiene ácido fólico, otro elemento que ayuda a reducir y controlar la hipertensión arterial.