Las focas grises dan a luz en pleno invierno y habitan, entre otros lugares, la «duna» cercana a la isla de Helgoland. Deben ganar peso rápidamente a lo largo de la temporada de invierno. Conozca aquí todo lo que hay que saber sobre la foca gris.
Datos y características de la foca gris
Las focas grises (Halichoerus grypus), están clasificadas como Animales Carnívoros (depredadores) y luego como una subfamilia de las Phocidae (focas perro). La foca gris recibe este nombre por sus dientes en forma de cono.
Las focas grises habitan en los mares fríos del Atlántico Norte, pero no en el Ártico. Hay tres poblaciones principales: El Atlántico Occidental (alrededor de la costa norteamericana), el Atlántico Oriental (alrededor de las costas de Gran Bretaña, Irlanda, Islandia y el Mar del Norte) y el Báltico (en el Mar Báltico).
Las focas grises están excepcionalmente adaptadas a vivir en el agua. Las focas son extremadamente ágiles y pueden alcanzar velocidades de hasta 30 kilómetros por hora. Se sabe que las focas grises se sumergen hasta 300 metros de profundidad y permanecen sumergidas hasta media hora en situaciones extremas. Las focas se protegen del frío gracias a su gruesa capa de grasa.
Además, las focas grises tienen un oído extremadamente sensible que les permite discernir la dirección. Sus bigotes también les ayudan a orientarse bajo el agua.
Hábitat de la foca gris
El hábitat de la foca gris son las aguas subárticas y las zonas costeras ricas en peces con numerosas rocas. Cuando son jóvenes, las focas realizan largas migraciones. Las madres de foca gris buscan témpanos de hielo o partes protegidas de las costas rocosas para criar a sus hijos.
Las focas grises también se encuentran en Alemania: están muy extendidas por el Mar del Norte y el Báltico. Helgoland tiene, con mucho, la mayor población de Alemania. Ocasionalmente, más de 1.000 animales se congregan en las playas de este lugar.
Las hembras autóctonas del Mar del Norte pueden alcanzar una longitud de 1,90 metros y un peso de 150 kilos. Los machos son significativamente más grandes, alcanzando una longitud de hasta 2,30 metros y un peso de hasta 330 kilos. Además, suelen tener un pelaje más oscuro que las hembras.
Aunque las focas grises maduras son enormes, pueden moverse con bastante rapidez en tierra. Si es necesario, un toro de foca gris adulto puede galopar por la playa a una velocidad de hasta 20 kilómetros por hora, ¡más rápido que un humano!